Al final del valle de Stare Slemene, en Eslovenia, se encuentra el antiguo monasterio superior de la Cartuja de Žiče (s. XII) que durante muchos años estuvo en ruinas. El proyecto de reforma responde al dilema de cómo intervenir en el material histórico y protegerlo al mismo tiempo. La iglesia se restaura como elemento principal, recreando sus dimensiones originales, mientras que un monolito flotante simboliza el punto de encuentro entre los restos y la reconstrucción. La reforma consiste en un techo plegable semimóvil que permite mantener la conexión con el cielo abierto y recuerda el largo período en que la iglesia se encontraba en ruinas. El objetivo principal era preservar la relación única entre las ruinas y sus efectos inmateriales. Con esta reforma, la iglesia se reactiva en la memoria colectiva, y se convierte en un icono de la historia de la ciudad.
[Última actualización: 06/11/2024]