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En los últimos años, un ambicioso plan de regeneración urbana está extendiendo el centro de Rotterdam, sito en la orilla norte del río Nieuwe Maas, hacia su orilla sur, sobre una antigua zona portuaria llamada De Kop van Zuid. Este sector, conectado a través del flamante puente de Erasmo, debe acoger próximamente a 56.000 nuevas viviendas y está viendo aparecer una serie de rascacielos –entre ellos el más alto de los Países Bajos– que modificarán sensiblemente el perfil arquitectónico del mayor puerto de Europa.Objeto de la intervención
Entre el 18 y el 25 de marzo de 2007, y en el marco de la iniciativa «Rotterdam, City of Architecture», este sector acogió un taller internacional de diseñadores de iluminación que reunió a reconocidos profesionales del ramo con ingenieros, arquitectos, paisajistas, urbanistas, técnicos municipales y estudiantes de diferentes disciplinas y procedencias. El objetivo del taller, bautizado como [email protected], era la experimentación y la difusión de nuevas ideas y técnicas de iluminación aplicadas al espacio público.Descripción
El taller arrancó con la selección, en función de su valor icónico, su excepcionalidad y su diversidad formal, de seis emplazamientos del frente fluvial, con el fin de someterlos a diferentes experimentos temporales de iluminación nocturna. La jornada se dedicaba al análisis de los lugares, el desarrollo y la discusión de conceptos, el bosquejo de diseños preliminares y la exploración de nuevas técnicas. Por la noche, los distintos experimentos se ponían en práctica a la vista del público y quedaban reflejados sobre las aguas del río, resucitando arquitecturas que la oscuridad había desvanecido y que se revelaban de nuevo con una insólita apariencia.Dos de los seis experimentos se realizaron en la orilla norte del Nieuwe Maas, en el barrio conocido como Scheepvaartkwartier. Uno de ellos consistió en iluminar por debajo el extremo norte del tablero del puente de Erasmo, mejorando la sensación de seguridad de la zona y resaltando con policromo dramatismo su presencia. El otro renovó la iluminación de la fachada decimonónica del Wereldmuseum, un reputado museo de arte del mundo. Al otro lado del río, el frente fluvial de De Kop van Zuid acogió otros dos experimentos. El primero reprodujo un espectacular juego de luces cinéticas en la fachada del Centro de Simulación Marítima. El segundo proyectó poéticos haces de luz sobre el Koninginnehoofd, un monumento a los emigrantes. Aún más al sur, una vez cruzado el puerto de Rijnhaven, se halla el barrio de Katendrecht, en cuya orilla se llevó a la práctica el último par de experimentos. Uno de ellos hizo resurgir de la oscuridad los masivos volúmenes de la fábrica Provimi y el otro instaló varios sistemas de alumbrado en el Buizenpark, un jardín que se convertía en un lugar alegre y seguro para encontrarse a medianoche. Durante el mes posterior al taller, los escenarios permanecieron iluminados por la noche y se definió un itinerario para ciclistas y peatones que permitía al público visitarlos de cerca. Un canal local de televisión emitió un documental acerca del acontecimiento y se publicó un libro como testimonio permanente.
Valoración
Esta instalación demuestra que un alumbrado público cuidado y ambicioso, aparte de reforzar la seguridad ciudadana y mejorar la accesibilidad y el uso del espacio público, puede constituir una potente herramienta para resaltar arquitecturas desapercibidas y conferir nuevos sentidos a lugares poco significados. Con una clara vocación pedagógica, explora nuevas técnicas para iluminar con eficacia grandes superficies de escala urbana reduciendo el consumo energético y la contaminación lumínica. Asimismo, demuestra que, a diferencia del carácter competitivo y fragmentario de la iluminación comercial, la iluminación planificada desde el ámbito público puede desempeñar un importante papel ordenador y connotativo sobre el paisaje urbano. Llevando el experimento a un escenario urbano, real y abierto al público, difunde sus potencialidades entre profesionales, políticos y ciudadanos con una significativa repercusión sobre la conciencia colectiva. Prueba de ello es que el ayuntamiento de Rotterdam ha empezado a redactar un plan general municipal para el diseño de la iluminación del espacio público.David Bravo Bordas, arquitecto
[Última actualización: 02/05/2018]
