El poeta y dramaturgo nacido en Luanda habló sobre la Europa actual y las tendencias que rigen la vida de sus ciudadanos.
El escritor portugués Gonzalo M. Tavares, considerado uno de los más relevantes de su generación, visitó el Centro de Cultura Contemporánea de Barcelona (CCCB) para pronunciar la conferencia «La ciudad y el viaje, fuentes de Europa», perteneciente a ciclo «La idea de Europa». El periodista y escritor Gabi Martínez fue el encargado de presentarla.
Tavares, para empezar, recordó que, como cohabitantes de un espacio común, «nuestro deber es intentar entender, comprender cuáles son las señales dejadas por las generaciones anteriores» y «dejar marcas y testigos para las generaciones que nos seguirán». Asimismo, dijo, «tenemos el derecho de emprender otro camino». «Prefiero vivir en una sociedad que tiene un ángel y un demonio que en una sociedad que tiene solo ángeles», dijo metafóricamente Tavares, para afirmar que «tenemos que aceptar lo que es absolutamente diferente de nosotros» y para mostrar lo que para él «debe ser la idea de Europa», un espacio de diversidad aceptada y compartida. Tavares intentó caracterizar al hombre de la ciudad europea como alguien que vive entre «dos mundos de problemas»: «el mundo de la economía y el mundo de la tecnología». Respecto a la primera, cree el poeta que «hemos entrado en una obsesión completa en cuanto a la cuantificación», ya que «hay cosas que no podemos contar, porque si no estamos destruyendo la base de Europa, los fundamentos del humanismo». Respecto a la tecnología, remarcó, en contra del reflejo ante esta, que «hay progreso técnico que significa progreso humano y hay progreso técnico que significa retroceso humano». Ante esta realidad doble, Gonzalo M. Tavares, incitando a la recuperación de lo más humano que nos define, dijo que la Europa que vive irreflexivamente «entre tecnología y economía, está situada en un lugar peligroso».